Y me parece apropiado luego que el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (ICEFI) presentó el miércoles 27 de noviembre su estudio "Diagnóstico de la política fiscal salvadoreña: 2007-2013" (Puede bajar documento, presentación y comunicado de prensa haciendo clic aquí).
El estudio, nos dice algunas cosas que ya sabíamos:
- Si bien la carga tributaria (La relación porcentual entre el monto de los impuestos recaudados y el Producto Interno Bruto de un año determinado) aumentó de 14.3% en 2007 al 15.4% en 2012, los ingresos fiscales siguen siendo insuficientes ante las necesidades del país, y las reformas tributarias que se realizaron, "no cambiaron el esquema tributario tradicional, poco equitativo y basado en impuestos al consumo"..."En esencia, el único impuesto directo aplicable en El Salvador es el impuesto sobre la renta (ISR), debido a que hasta la fecha no ha sido posible implementar un impuesto al patrimonio, el cual podría ser otra fuente de ingresos". Demás está aclarar que quienes se oponen a este impuestos son quienes tienen más patrimonio (Patrimonio es el conjunto de los bienes y derechos pertenecientes a una persona, física o jurídica).
- El gasto público ha ido de 20% del Producto Interno Bruto (PIB) en 2008, al 23% en el período 2009-20012.
- El ICEFI considera que el gobierno que asuma en 2014 deberá revisar sin demora los subsidios de gas propano y electricidad, así como la deuda previsional ("La deuda previsional es la "...responsabilidad del gobierno central de asumir la obligación de pagar a las pensiones del Sistema Público de Pensiones (SPP) a partir del agotamiento de las reservas técnicas del ISSS e INPEP, mismas que al entrar en vigor la reforma previsional en mayo de 1998, solo duraron hasta cubrir una parte de las prestaciones de 2001, por lo que desde ese año, se agregó una carga financiera más al Estado..." Pág. 17 "El Salvador: Análisis de sostenibilidad fiscal" - Funde).
El estudio de ICEFI es rico en información, vale la pena comentarlo más despacio, de momento lo que deseo resaltar es que no solo ICEFI, sino también otros centros de pensamiento económico han dicho que es indispensable el Pacto Fiscal, acuerdo de país o como quieran llamarlo, pero El Salvador, para seguir con vida, requiere que los principales actores asuman la responsabilidad de establecer el plan a futuro inmediato, mediato y a largo plazo... a la fecha ninguno de los tres candidatos más reconocidos, se ha comprometido con un Pacto fiscal, con la transparencia (en serio) y la claridad en el manejo de los fondos que los salvadoreños le encomendemos administrar y menos aún con la deuda previsional que terminará afectándonos a todos (viejos y jóvenes, hombres y mujeres, empleados y desempleados).
A partir de esa realidad es que se me hace tan cierto (y doloroso) darme cuenta que "El Salvador tiene salida (Comalapa)".